Historia de Grecia

Grecia es la cuna de una gran civilización que tuvo una enorme influencia en el resto de Europa especialmente en toda la costa del Mediterráneo y parte de Asia. Hoy en día perduran sus enseñanzas en muchos campos, en especial la infinidad de palabras de nuestro idioma castellano  que en parte o totalmente tiene sus orígenes en el idioma griego.
Han pasado tantos pueblos por sus tierras, se han dirimido grandes batallas, se han expandido por todas partes, que es difícil resumir su historia. Además está trufada de episodios de la mitología, que  parece envuelta por una heroica nebulosa.
Hay varios puntos de asentamientos florecientes:  los monoicos en Creta y los aqueos en Micenas que destacaron por su riqueza proveniente del comercio, la agricultura y actividades relacionadas con el mar.
En el milenio anterior a Cristo surgieron las ciudades-estado, las polis, sobre todo en las zonas costeras. También se desarrollaron los Juegos Olímpicos ( 776 a. C.).
Hubo grandes guerras entre las polis: Esparta, Atenas, Corinto, Argos, Tebas, etc.. Todas querían ser la que tuviera la preponderancia del poder del mar.
En el siglo V a. C. se desarrollaron las famosas Guerras Médicas contra los persas. Darío, rey persa, organizó una gran expedición contra las ciudades-estado griegas. Ante este peligro las polis se unieron contra los invasores. La primera oleada se paró ganando la Batalla de Maratón y la 2ª Guerra Médica se saldó con la victoria de los griegos en las batallas de Salamina y Termópilas contra Jerjes, hijo de Darío.
La época de máximo esplendor fue en la era de Pericles (462-429 a. C.). Se formularon leyes con un sentido más democrático, retribuyendo a los cargo públicos y se inició la reconstrucción de la ciudad de Atenas tras las guerras Médicas. Los nobles pasaron a un segundo plano, mientras que la clase media de marinos, comerciantes y artesanos se convirtió en una clase privilegiada que obtuvo la dirección política de la ciudad.
Pericles logró acabar con los conflictos con los persas firmando un armisticio beneficioso (449 a. C.). Con respecto a Esparta hizo un pacto de 30 años para que reconociera la Liga de Delos y en compensación Atenas renunciaba a la hegemonía terrestre.
Las ciudades antes sometidas a Atenas vieron que Esparta era todavía peor y más dura por lo cual hubo un alzamiento generalizado. Esparta pidió ayuda a los persas lo que obligó a los aliados a aceptar la Paz de las Antálcidas (386 a.C.). Esto ocasionó que Persia se anexionara todas las colonias griegas en Asia Menor y cerró a Atenas toda posibilidad de rehacer su antiguo imperio marítimo, mientras reconocía el papel  de Esparta de rectora de la Liga del Peloponeso.
Esparta siempre intentaba imponerse en los diversos estados, sin embargo Persia ya no pudo acudir en su ayuda y al final fue vencida en la batalla de Leuctra y finalmente en la de Mantinea (362 a. C.).
Esta debilidad la aprovechó Filipo II de Macedonia. Era un gran admirador de la cultura griega, por lo que decidió unificar las polis griegas, excepto Esparta, y terminar con las luchas internas. Esto se logró con la intercesión de su hijo Alejandro Magno. Unificados declararon la guerra a Persia y al ser asesinado Filipo II  (336 a. C.) subió al trono Alejandro III de Macedonia, conocido como Alejandro Magno. Consiguió la victoria sobre los persas y amplió su imperio por Anatolia, Siria, Fenicia, Judea, Gaza, Egipto, Bactriana, Mesopotamia llegando hasta la región del Punjab en la India. Sus deseos de expandirse hacia Europa se truncaron por su repentina muerte debido a alguna enfermedad infecciosa. Su imperio fue repartido entre sus generales.
El Helenismo duró hasta finales del siglo I a. C. por las guerras contra los persas, con los romanos y el desmembramiento de los reinos. Entonces empezó a formar parte Grecia del Imperio Romano. Este periodo de relativa prosperidad fue interrumpido por las invasiones de los bárbaros.
A partir del año 359 pasó a formar parte  del Imperio de Oriente o Bizantino, siendo Constantinopla la capital. Musulmanes, búlgaros, normandos, venecianos, franceses e incluso miembros de la Corona de Aragón pasaron por estas tierras.
Debido a las continuas luchas entre los distintos pueblos a lo largo de los años salieron beneficiados los turcos otomanos que empezaron a controlar la Grecia continental a partir del siglo XV, aunque algunas islas permanecieron bajo la soberanía veneciana hasta el siglo XVIII. Durante la dominación turca que duró cuatro siglos aplastaron cualquier tipo de insurrección. Dividieron el territorio en seis provincias a las que obligaban a pagar tributos con el fin de permitirles practicar su religión y conservar sus características nacionales.
A principios del siglo XIX se suceden un conjunto de revueltas en Constantinopla apoyadas por los ejércitos ingleses, franceses y rusos por el ansia de los europeos por abarcar los territorios ocupados por los turcos. Esto desembocó en la Batalla de Navarino en 1827 con la derrota espectacular de los turcos otomanos. Se llegó entonces a establecer un tratado en 1829 que con la aquiescencia de rusos y turcos, Grecia resurgía como país independiente.
Grecia inició su etapa monárquica con Otón Wittelsbach, de origen bávaro, hijo de Luis I de Baviera en 1833. Gobernó de forma dictatorial apoyado por un consejo de bávaros lo que produjo grandes revueltas con un golpe de estado en 1843 que le obligó a conceder algunas libertades, apoyado por Rusia.
Tuvo que abdicar en 1862 e Inglaterra logró que la Asamblea griega nombrara a Jorge I, hijo del rey de Dinamarca y cuñado del Príncipe de Gales. En 1864 se aprobó una nueva Constitución que reducía los poderes monárquicos e instauraba el sufragio universal.
En 1913 fue asesinado y estalló una nueva Guerra Balcánica contra Turquía que ganó Grecia, consiguiendo duplicar su territorio nacional.
En 1914 subió al trono el rey Constantino I, cuñado de Guillermo II de Alemania. Al estallar la 1ª Guerra Mundial el país se dividió en dos bandos: los germanófilos apoyados por el rey y los pro aliados cuyo jefe era Leoforos Venizelos. A pesar de haber ocupado Macedonia, Salónica, Corinto y el Pireo, el rey Constantino I tuvo que abdicar en su hijo Alejandro, tras la revolución de los Coroneles. Este nuevo rey murió en 1920 y tuvo que volver su padre Constantino I. Venizelos se exilió a Francia y el turco Mustaf Kemal Atatürk no reconoció los tratados anteriores y se entabló una Guerra entre Turquía y Grecia. Fue un desastre y obligaron al rey Constantino I a abdicar otra vez  en 1922 en su hijo Jorge II. Varios de sus ministros fueron acusados de traición y los encarcelaron y a algunos los fusilaron. Tuvieron que firmar un tratado desfavorable en el que perdían todo lo ganado anteriormente en Asia Menor y aceptar la repatriación de 1.400.000 refugiados griegos, lo que supuso una hecatombe económica. Esto favoreció el desarrollo de la oposición republicana. En Diciembre de 1924, por la presión de los militares, el rey Jorge II abdicó y se instauró una regencia.
A raíz de este episodio se aprobó mediante un plebiscito la adopción de la República como forma de gobierno. No fue una época gloriosa debido a la inestabilidad y a su ineficacia para modernizar el país.
En 1935 se volvió a la Monarquía a través de otro plebiscito y volvió Jorge II.
Durante la Segunda Guerra Mundial, Grecia fue invadida por las tropas italo-germanas y en su territorio ocurrieron grandes batallas entre los dos bandos enfrentados. El rey se vio obligado a expatriarse de nuevo.
Durante la guerra se formaron dos grandes grupos contrarios: los colaboracionistas y los partisanos.
Al finalizar la guerra, el descontrol y descontento provocó una guerra civil. El rey Jorge II volvió por tercera vez pero murió  muy pronto en abril de 1947 y ocupó el trono su hermano Pablo I  (padre de nuestra Reina Doña Sofía) que al nombrar como primer ministro a Konstantinos Karamanlis estabilizó la situación política.
En 1962 Grecia ingresó en el Mercado Común Europeo. Hubo un cambió de primer ministro, que fue Andreas Papandreu.
En Marzo de 1964 falleció el rey Pablo I y subió al trono su hijo Constantino II. Fue una época de gran turbulencia política que desembocó en el “Golpe de los Coroneles” en 1967. El rey tuvo que abandonar precipitadamente el país. Fue una época muy dura con una represión brutal, con detenidos en campos de concentración. Desgraciadamente este periodo fue apoyado por Estados Unidos y las grandes fortunas griegas como Onassis y Niarchos.
A partir de 1973 se proclamó la República Democrática y hoy en día está integrada en la Comunidad Económica Europea.

Situación y población

Idioma y Religión

El idioma oficial es el griego. El origen es el griego clásico que con las diferentes transformaciones sufridas se puede dividir en Griego antiguo, Griego medieval y Griego moderno o “demotiki”, el que habla el pueblo. Es una lengua de origen indoeuropeo.
Todavía hay núcleos fuera de Grecia en que se habla el griego en el sur de Albania, sur de Italia (griego salentino)  y reductos en Georgia, Ucrania, Bulgaria y Rumania.
Es la lengua que tiene el mayor registro histórico continuado de unos 3400 años. Está en pugna con el chino y el egipcio.
El alfabeto actual es casi igual al clásico con pequeñas variaciones.
No hay dialectos, solo diferencias de pronunciación entre las islas y las zonas montañosas.
En todo el país los carteles están escritos con su alfabeto y con el latino.
Pero para comunicarse con el exterior impera el inglés.
La religión es la cristiana ortodoxa griega. La gran mayoría de la población profesa esta religión, un 98%. El resto es católica, musulmana y de alguna otra religión.
Es una de las tres religiones cristianas: la católica, la protestante y la ortodoxa.
La iglesia ortodoxa está constituida por 15 iglesias autocéfalas y cada una de ellas tiene su propio Patriarca. El cargo honorífico de “Primus inter pares” (primero entre iguales) lo tiene el Patriarca de Constantinopla. No se puede consensuar nada sin el consentimiento de todos los Patriarcas.
El Cisma que dividió a la iglesia ortodoxa viene de 1054.
No hay grandes diferencias ideológicas con la iglesia católica. Son más de la celebración de los ritos.
La celebración del sacramento se hace sin que los fieles lo vean, al contrario que en la católica, así como no se puede realizar ningún rito fuera de las iglesias. Las representaciones siempre son en dos dimensiones.
El Credo tiene sus diferencias en cuanto a la procedencia del Espíritu Santo.
La Redención no es el castigo sino la divinización del hombre.
El adulterio es causa de divorcio y se pueden contraer nuevas nupcias.
Se pueden ordenar hombres ya casados, pero no casarse ya ordenados.
No hay órdenes ni congregaciones religiosas, sólo monasterios y monjes.
No se utilizan instrumentos musicales en las liturgias, solo la voz humana.
No admiten la infalibilidad del Papa.
La Iglesia está subvencionada y sostenida por el estado.

La Economía y el Medio Ambiente

Las fuentes de riqueza de la economía griega empiezan por la Flota Mercante que es la tercera del mundo  y navega por todos los mares, y los Astilleros con la construcción naval.
Otra actividad lucrativa es el Turismo. La atracción por los lugares históricos y las islas potencian esta actividad de servicios.
Después se encuentran los productos agrícolas exportables como el aceite ( tercer país exportador del mundo ), olivas y frutas. El  tabaco y el algodón tuvieron su época dorada pero ahora están en franca recesión. También exporta vinos, mármol, bauxita, artesanía de joyería, iconos y cerámica.
La industria está en pleno desarrollo. La textil que era boyante, está ahora bajo mínimos por la presión del mercado chino.
Hay industrias de acero, cemento, minería metalúrgica, química y procesamiento de productos alimenticios.
No hay grandes diferencias económicas entre las distintas zonas del país.
El clima en Grecia es eminentemente mediterráneo templado,  con inviernos húmedos y veranos secos y calurosos.
La distribución del territorio griego es: 40%  es ganadero, el 30% agrícola, el 20% lo ocupan los bosques y el 10% restante las ciudades habitadas.
El relieve de Grecia se caracteriza por la cantidad de picos de montaña que tiene, es el país con mayor número de ellos. Es el tercer país más montañoso de Europa. Las principales cadenas montañosas son los Alpes Dináricos al oeste, los Montes Rodope y el Monte Olimpo, donde se encuentra el pico más alto de Grecia, el Monte Pytikas de 2.919 metros de altura.
Los ríos griegos son cortos pero muy numerosos. Son de régimen pluvial ya que no tienen grandes aportaciones por las nieves.
La zona oeste del país es la que tiene más potencial hídrico. No hay grandes lagos y los que existen son pequeños.

La cultura y la educación

Como cuna del teatro hay una gran actividad cultural. Atenas cuenta con más de 150 teatros, donde se están representando obras clásicas continuamente. Además hay muchas salas de música y conciertos.
Incluso los teatros antiguos se utilizan para festivales de representación de las grandes tragedias.
Los medios de comunicación son muy similares a los españoles, pero menos mediatizados por la política.
La enseñanza es obligatoria y gratuita hasta los 16 años.
Al tener un idioma algo diferente, desde los primeros cursos es obligatorio el aprendizaje del inglés y dos cursos más adelante el del francés. Más avanzados,  incluyen un tercer idioma a elegir entre español y alemán.

Gastronomía

La cocina griega no es exquisita, sino de contundencia y utilizando las verduras que se cultivan en sus tierras.
Tiene influencias italianas, de Oriente Medio y balcánicas.
El principal ingrediente es el aceite de oliva. Se añade a casi todos los guisos orégano y menta.
Para empezar son muy típicos los “mezze” de clara influencia árabe. Son salsas para untar como el Tzaziki (Yogurt, pepino, ajo, limón, eneldo y aceite de oliva), la Taramasalata  (huevas de salmón o carpa, pan, aceite de oliva y zumo de limón), los Dolmades  (hojas de vid hervidas rellenas de carne, arroz o vegetales).
Otros platos típicos son las espinacas envueltas en pasta filo así como el queso también envuelto y las empanadas de queso y espinacas llamada Spanakopita o el Tiropitakia, triángulos rellenos de queso.
Pero el plato más conocido de la cocina griega es la Mousaka, parecida a una lasaña que tiene una base de patata y se van alternando capas de carne picada condimentada y láminas de berenjena frita o asada, acabando por una capa de besamel espesa,  gratinada después con queso rallado.
Las ensaladas están presentes en todos los menús con los magníficos productos de la huerta, enriquecidos por el queso feta y las ricas aceitunas.
El licor más popular es el Ouzo, aguardiente anisado.
El café griego, por influencia turca, es muy fuerte y azucarado, aunque la bebida más solicitada es el café Frappé. Tomar café es muy caro pero ellos dan la explicación de que es la bebida que se toma después de comer o por la tarde y están mucho tiempo en el bar sin consumir otra cosa y lo tienen que amortizar.

Conclusiones

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